5.273.600 de personas en paro

Según la Encuesta de Población Activa (EPA) de Enero, el número de personas en paro en España es de 5.273.600.

Y la cifra va en aumento. En tres años se han quedado en paro más de 3 millones de personas, tres años en los que no han dejado de aplicarse medidas neoliberales a la economía y al mercado laboral. Incomprensiblemente se sigue haciendo.

El más perjudicado, como siempre, el Sur. En el siguiente gráfico se puede observar cómo las comunidades del sur de España están muy por encima de la media de paro del total del país.

Aquí puedes descargar la EPA del 4º trimestre de 2011, en la que están todos estos datos. Es tiempo de movilización, no de apretarse el cinturón.

Fuente de los gráficos: El País

Especial 15 M

Aquí dejamos dos especiales informativos sobre el 15 M.

LA INFORMACIÓN.COM: Documental web interactivo sobre los 25 días de acampada de los «indignados» en la Puerta del Sol de Madrid. Esta ocupación pacífica de la céntrica plaza dio lugar al nacimiento y organización del movimiento ciudadano 15M, que reclama un cambio hacia un modelo político, económico y social más justo y digno. Pincha en la imagen para acceder a la información.

PERIODISMO HUMANO: Especial de Periodismo Humano con toda la cobertura del  llamado Movimiento 15M. Pincha en la imagen de abajo para tener toda la información.

Las ignoradas causas del paro

VICENÇ NAVARRO

Uno de los dogmas neoliberales que se reproducen con más frecuencia en los círculos empresariales y financieros (y ahora –con la reforma aprobada por el Gobierno Zapatero– en los círculos políticos dominantes) es el de atribuir el elevado desempleo en España a supuestas rigideces del mercado de trabajo, consecuencia de un excesivo poder de los sindicatos. Esta postura se promueve en los medios de mayor difusión y se ha convertido en la sabiduría convencional del país. De esta interpretación de las causas del desempleo se concluye que la intervención más eficaz para resolverlo consiste en desregular los mercados laborales, diluyendo el papel de los sindicatos en los convenios colectivos y facilitando el despido de los trabajadores. Sigue leyendo

Sintiendo los colores del parado 5.000.000

Fuente: ATTAC

Rostros desencajados… y exultantes; llantos, desgarro… y saltos, brazos en alto para atrapar la gloria. Cara y cruz que dicen. Mucho. Dicen mucho. El parado 5 millones de España ha entrado en la portería. En la suya. En la que le roba presente y futuro. La sociedad española se cubre de mantos negros. Una parte, la otra festeja el triunfo del neoliberalismo, de sus dioses en la tierra, y la parcialidad del árbitro. Los mercados más cerca del cielo. El parado, todos los 4.999.999 anteriores, han perdido. Ha sido un absoluto robo, en un partido podrido, sucio, bronco… ¿bronco en serio? Sí, el empresario le ha clavado el tacón al parado en el gemelo derecho, aunque involuntariamente –al decir de los comentaristas parciales-. La estrategia era de una importancia vital –digo vital- pero ha fallado. Veamos otra vez la escena, ralentizada, el parado cinco millones entrando irremisiblemente debajo del larguero, entre los dos palos, en puerta, ante la mirada desolada de sus compañeros de equipo, y la desbordada alegría del rival… seguir leyendo

más de 300 personas indignadas contra el paro

Más de 300 personas nos dimos cita ayer, 14 de abril, en los Llanos del Pretorio para expresar nuestra indignación contra el paro. Aquí dejo algunas fotos de la concentración. Pincha en la imagen para ver la presentación

Así lo recogió el diario 20 minutos (bastante mal, por cierto, ya que quien convoca no es el colectivo Indignate con el paro sino la ACO y la Parroquia de Valdeolleros… al menos ha salido)

Así lo recogió el Diario Córdoba el domingo.

No al Paro (por José Saramago)

No al Paro

“La gravísima crisis económica y financiera que está convulsionando el mundo nos trae la angustiosa sensación de que hemos llegado al final de una época sin que se consiga vislumbrar qué y cómo será lo que venga a continuación.

¿Qué hacemos nosotros, que presenciamos, impotentes, al avance aplastante de los grandes potentados económicos y financieros, locos por conquistar más y más dinero, más y más poder, con todos los medios legales o ilegales a su alcance, limpios o sucios, normalizados o criminales?

¿Podemos dejar la salida de la crisis en manos de los expertos? ¿No son ellos precisamente, los banqueros, los políticos de máximo nivel mundial, los directivos de las grandes multinacionales, los especuladores, con la complicidad de los medios de comunicación social, los que, con la soberbia de quien se considera poseedor de la última sabiduría, nos mandaban callar cuando, en los últimos treinta años, tímidamente protestábamos, diciendo que nosotros no sabíamos nada, y por eso nos ridiculizaba? Era el tiempo del imperio absoluto del Mercado, esa entidad presuntamente auto- reformable y auto-regulable encargada por el inmutable destino de preparar y defender para siempre jamás nuestra felicidad personal y colectiva, aunque la realidad se encargase de desmentirlo cada hora que pasaba.

¿Y ahora, cuando cada día aumenta el número de desempleados? ¿Se van a acabar por fin los paraísos fiscales y las cuentas numeradas? ¿Será implacablemente investigado el origen de gigantescos depósitos bancarios, de ingenierías financieras claramente delictivas, de inversiones opacas que, en muchos casos, no son nada más que masivos lavados de dinero negro, del narcotráfico y otras actividades canallas? ¿Y las expedientes de crisis, hábilmente preparados para beneficio de los consejos de administración y en contra de los trabajadores?

¿Quién resuelve el problema de los desempleados, millones de víctimas de la llamada crisis, que por la avaricia, la maldad o la estupidez de los poderosos van a seguir desempleados, malviviendo temporalmente de míseros subsidios del Estado, mientras los grandes ejecutivos y administradores de empresas deliberadamente conducidas a la quiebra gozan de cantidades millonarias cubiertas por contratos blindados?

Lo que está pasando es, en todos los aspectos, un crimen contra la humanidad y desde esta perspectiva debe ser analizado en los foros públicos y en las conciencias. No es exageración. Crímenes contra la humanidad no son solo los genocidios, los etnocidios, los campos de muerte, las torturas, los asesinatos selectivos, las hambres deliberadamente provocadas, las contaminaciones masivas, las humillaciones como método represivo de la identidad de las víctimas. Crimen contra la humanidad es también el que los poderes financieros y económicos, con la complicidad efectiva o tácita de los gobiernos, fríamente han perpetrado contra millones de personas en todo el mundo, amenazadas de perder lo que les queda, su casa y sus ahorros, después de haber perdido la única y tantas veces escasa fuente de rendimiento, es decir, su trabajo.

Decir “No al paro” es un deber ético, un imperativo moral. Como lo es denunciar que esta situación no la generaron los trabajadores, que no son los empleados los que deben pagar la estulticia y los errores del sistema.

Decir “No al paro” es frenar el genocidio lento pero implacable al que el sistema condena a millones de personas. Sabemos que podemos salir de esta crisis, sabemos que no pedimos la luna. Y sabemos que tenemos voz para usarla. Frente a la soberbia del sistema, invoquemos nuestro derecho a la crítica y nuestra protesta. Ellos no lo saben todo. Se han equivocado. Nos han engañado. No toleremos ser sus víctimas.

José Saramago

Hay solución, hay dónde expropiar

Lo que vivimos es una expropiación social en toda regla cuya única alternativa es la expropiación de toda esta gentuza.  Y como vemos, hay dónde barrer.

Según podemos leer en el propio periódico Expansión, un selecto grupo de empresarios e inversores, que son los principales accionistas de las compañías del Ibex, cobrarán más de 1.300 millones de euros en dividendos a cuenta del ejercicio 2010, una cifra que supone un incremento cercano al 14% respecto a lo percibido el año anterior. Seguir leyendo en Insurgente.org

 

La ‘Juventud sin futuro’ se manifiesta el jueves

En Portugal, miles de jóvenes salieron a la calle para protestar contra la crisis y la falta de oportunidades. En Inglaterra, los estudiantes protestaron por los recortes del Estado y en Italia se preparan para manifestarse contra la precariedad en la que viven. Ahora en España, el colectivo Juventud Sin Futuro busca seguir los pasos de sus homólogos europeos y manifestarse contra lo que ellos consideran que está acabando con sus expectativas de futuro. Para ello, han convocado el próximo 7 de abril una manifestación a las 19.00 en la Plaza de Antón Martín de Madrid. Lo han anunciado, como se hace en estos tiempos, a través de FacebookTwitter y de su página web, donde han colgado un manifiesto, al que ya se han adherido más de 2.000 personas. Lee el artículo completo en El País